Ayer dió comienzo la tercera edición de Pekin Express y si bien de momento no quiero comentar nada de la gala de ayer, sí tenía muchas ganas de hacer esta entrada.
The Amazing Race, el programa americano lleva ya 16 ediciones mientras que el español se queda en 3 (a parte de ser una versión del Pekin Express francés)
Esa es la primera diferencia, pero no es la única ni mucho menos. Yo suponía que TAR era exactamente igual que PE pero cuando lo empecé a ver, las diferencias eran muy acusadas. En primer lugar, el número de parejas en el programa americano son un total de 11 parejas mientras que en el español son 10.
Los lugares a visitar son otro punto en el que se diferencian totalmente, la versión española visita unos pocos países a lo largo de la edición (esta última se ha superado, con 5) y la versión americana puede recorrer tantos países como días dura la carrera. En The Amazing Race cada dos programas suelen coger un avión hacia cualquier parte del mundo, de repente se levantan una mañana en Brasil y tachán vete a Rusia en el primer avión que pilles, y claro aquí vienen las rivalidades por llegar al aeropuerto y encontrar los primeros billetes cuanto antes. Muchas veces ocurre que unos pocos concursantes encuentra sitio en un avión y otros no salen hasta tres horas después.
En Pekin Express los concursantes saben hacia donde van todo el tiempo, ya que la ruta está establecida y se la comunican al principio del concurso. Así que por la mañana se levantan y saben perfectamente a donde han de dirigir sus pasos, las direcciones se las dejan en sus bolsas estanca, junto con un euro al día y algunas frases para comunicarse con la gente del lugar.
En cuanto al dinero de los estadounidenses no tengo noticias, supongo que se podrán llevar una determinada cantidad de su casa, porque todos tienen bastante dinerito y nunca hablan de la forma de conseguirlo.
Y ahora vamos con lo que me llama la atención y lo que hace que prefiera mil veces mi Pekin Express que The Amazing Race... Los pekineros tienen que hacer autostop para llegar a sus destinos, hablar con los lugareños para conseguir alojamiento y hacer pruebas de inmunidad. A mi me parece que esa es la gracia del programa, así que si lo comparas con TAR en la que los concursantes van a los sitios en taxis o en coches que les pone el programa y duermen todas las noches en un campamento... parece que van a un SPA.
También es verdad que los americanitos tienen que hacer varias pruebas a lo largo de un día, algunos son desvíos, en los que tienen que elegir entre dos pruebas casi siempre relacionadas con la cultura del lugar, otros son bloqueos que son pruebas que solo puede hacer un miembro de la pareja. Todo esto para conseguir las "clue" (pistas), que siempre tienen que abrir y les dicen lo siguiente que tienen que hacer (es increíble como se equivocan las parejas por leer mal las pistas!) .
En cuanto a las metas, el primero que llegue en PE gana un amuleto que son 5000 euros que podrán embolsarse si ganan la final con lo cual, ganaran tanto dinero como amuletos hayan conseguido durante toda la carrera.
En TAR el que llega primero lo que consigue es un premio que normalmente son viajes, pero también coches etc... y el que gana la final del programa gana 1,000.000 de dolares (cosa que todos tienen MUY presente)
Basicamente, estas son las cosas que más resalto de los dos programas. Aunque las dos me gustan mucho, Pekin Express tiene el reto del autostop, el conseguir alojamiento y comida con muy muy poco dinero. Sinceramente, los otros me parecen muy pijos pero es genial ver cada programa (más o menos) un país nuevo.
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